Tipo de Ruta: Circular Dificultad: Baja Recorrido: 8,7 km Ciclable: NO
Tiempo Total: 3:20 horas Tiempo en Movimiento: 2:05 horas
Altitud máxima: 552 metros Desnivel
positivo: 201 metros Desnivel
negativo: 200 metros
Desnivel acumulado: 401 metros Fuentes: NO Sombras: 0%
Recomendada: evitar días muy calurosos Realizada:
01-09-2020 Señalizada: NO
Descripción:
Como dice en la web de turismo de Castilla
la Mancha, la ruta nos traslada a un paraje en cierta manera parecido al Cañón
del Colorado; salvando las distancias. El lugar fue declarado Monumento Natural
en el 2010, por el Gobierno Autónomo de la región.
Las
Barrancas representan un singular ejemplo del paisaje de incisión del río Tajo,
que discurre encajado a lo largo de la mayor parte de su trazado. Se trata de
un conjunto de gargantas y cárcavas que se ha desarrollado al pie de un
importante escarpe excavado por el río en los materiales detríticos de edad
terciaria que rellenan su cuenca sedimentaria.
Hay dos recorridos, uno corto de ida y
vuelta que apenas suma los tres kilómetros y el largo, que es él descrito a
continuación; recorriendo de Este a Oeste, todo el contorno con numerosos
puntos para tomar fotos y panorámicas impresionantes.
Desde el aparcamiento de Las Barrancas, al
que se accede desde el km-24,2 de la ctra CM-4000, seguimos en la misma
dirección por el Camino de la Puebla de Montalbán, Camino Natural del
Tajo y GR-113;
con una pendiente media del 7,5% en toda la subida. En la primera bifurcación,
proseguimos de frente, dejando la derecha para el regreso y viendo a la
izquierda unos grandes eucaliptos.
Con la confirmación de indicaciones y
balizas, dejamos un desvío a izquierda, alcanzamos la máxima altura (552m) del
recorrido y llegamos a la segunda bifurcación (0:37h - 2,56km), en el
que abandonamos el actual trazado por el Camino de las Dehesas; por el que andamos hacia el Sur durante unos setecientos metros.
En éste punto y aunque parece que no existe
camino a la derecha, hay que virar. Pues más adelante no se puede acceder al
entorno de las cárcavas, por estar acotado por una alambrada; como se verá a
continuación. Hoy precisamente estaba arado, pero gracias a Victorino que lo
sabía por experiencia, giramos y en cuatro pasos estamos en el extremo oriental
de Las Barrancas.
La primera impresión es descomunal; el
cortado es de vértigo y la vista general nos deja sin palabras. Por si faltaba
algo, abajo, el Río Tajo
retenido por el Embalse de Castrejón inaugurado en el 1967 y al fondo los Montes
de Toledo.
Recorremos tres kilómetros y medio, asomándonos
a numerosas puntas que se alzan entre ochenta y cien metros y con la vista en
el centro del maremágnum de grietas y cortados arcillosos, del Pico del
Cambrón que con sus 120 metros y un ojo (ventana), parece vigilar la paz
que reina en el lugar.
Alcanzado los Altos
de Torralba, con una construcción en ruinas,
descendemos hasta las dos zonas seguras del Mirador del Cambrón (6,81km) único
tramo protegido con empalizada de madera y puesto que ha salido el sol y
aprieta de lo lindo, decidimos dar por finalizada la visita y retornar al punto
de partida por el camino de la Senda Ecológica.
Nota 1: La ruta se
puede alargar 2,7km y 180 metros más de desnivel (con bajada al río) prosiguiendo
al Sur, por la misma senda ecológica hasta el Mirador de los Enebros,
desde el que hay un caminito que baja hasta la orilla del embalse y luego de volver
a subir, continuar circunvalando para regresar al aparcamiento, por el Camino
de las Barrancas.
Nota 2: Al atardecer,
las escarpadas y afiladas paredes, ganan en belleza al potenciarse su color
rojizo.
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