Tipo de Ruta: Circular Dificultad: Alta (IBP: 81)
Recorrido: 15,2 km Ciclable: NO
Tiempo Total: 6:56 horas Tiempo en Movimiento: 4:33 horas Altitud
mínima: 923 metros
Altitud máxima: 1599 metros Desnivel
positivo: 814 metros Desnivel
negativo: 814 metros
Desnivel acumulado: 1628 metros Fuentes:
NO Sombras:
10%
Recomendada: todo el año Realizada: 30-05-2019 Señalizada: NO
Descripción:
Segunda vez que
voy a ver las pirámides sin estar en Egipto, me refiero lógicamente, a las tres
mini replicas, situadas en la parte oriental de La Pedriza Anterior, muy cerca de Peñas Sordas. Ésta vez en compañía de Angel, Fernando y Victorino,
partiendo de la c/. de las Pozas, a las afueras del pueblo de Manzanares el Real; inicio de la Senda de la Rinconada o Senda Maeso y paso del PR-M
1; lo que supone meternos
entre pecho y espalda un desnivel de 645 metros con rampas de hasta el 42%.
Siguiendo pues la archiconocida senda, tras una primera
trepada llegamos al Collado del Alcornocal <donde se une la senda que viene de la zona de, El Tranco> y superando
piedras estamos en el Collado de la Cueva, con el desvío a la Cueva
del Ave María, que nos acercamos a verla. De nuevo en la senda, vemos las
piedras bautizadas; El Caracol, El Candelabro y el Risco del Ofertorio, antes de llegar al Cordel de La Pedriza <más conocido como La Gran Cañada> y paso del GR-10 (1:14h – 2,42km).
Con la misma pendiente y posiblemente con algo más de
dificultad <sobre todo en invierno> dejamos a la derecha el Risco de los Lunes y el Risco de los
Martes,
luego a siniestra dos desvíos a Las Cerradillas; donde está El Elefantito. Pasado el
tramo de La Rinconada, se pasa al
pie del Risco
de Cinco Fisuras y a la izquierda parte un desvío a la Pradera de El
Yelmo.
Continuando por el PR-M 1, ignoramos
otro desvío a siniestra a El Yelmo; vemos a la derecha La Caperucita y ya en
descenso, pasamos junto al gran peñascal de El Acebo, antes de la bifurcación (4,44km); habiendo dejado a la
diestra La
Cara
<bien reconocible> y Las Cuatro Damas, que nunca consigo encontrar el motivo del nombre.
Con dirección Este sobre una senda bien reconocible, bajamos
hasta una llanura donde destacan las tres
Pirámides <la más grande sin terminar> obra que en el grupo crea la
discusión, sobre el hecho de tal construcción en el paraje natural (3:05 – 5,46km). Lo que esta claro es que no las hicieron los aztecas, ni los incas; tuvieron que ser los mayas, porque están muy allá.
Prosiguiendo en el mismo sentido a la entrada de Peñas Sordas, hacemos el descanso reglamentado; no por lo andado,
pero si, por el tiempo y esfuerzo.
Atravesadas Peñas Sordas, damos con un pequeño cercado que
cruzamos para llegar a floreado llano, la Pradera
del Cervunal, en la zona de El
Jaralón; enlazando con su buen camino que pronto dejamos para acercarnos a
ver la abandonada Cantera de Gneis (7km). Otra vez en
el camino, volvemos a dejarlo para seguir otro que desconocía y que no aconsejo
utilizar, al no aportar nada interesante y pasar junto a dos colmenas de
abejas.
Por tercera vez en el buen camino (8 km) en éste tramo también Camino de la Cantera, pasamos entre sabinas y cruzamos el Arroyo de
Santillana, entroncando con el Cordel
de Prado Herrero, que poco después también utiliza el trazado del GR-10. Pasada la finca de el Berrueco, donde se ve la
piedra conocida como La Muela, dejamos ésta vía para continuar el itinerario del
gran sendero, por el Cordel de La
Pedriza (5:11 h – 9,37 km).
Dejando la finca Los Algibes,
dentro de la cual hay restos de un yacimiento, volvemos a cruzar el Arroyo de
Santillana y nos desviamos a la derecha para ver La Raja (10,1 km) otra pequeña cantera a dos niveles y a los que se accede independientemente; siendo la segunda utilizada para prácticas, por los escaladores. Apenas andados trescientos
metros por el GR-10, lo dejamos para entrar en la Dehesa Boyal de Colmenarejo.
