Alcalá de Henares, Parque Natural Los Cerros, Cerro de Malvecino, Cueva de Malvecino, Alcalá la Vieja, Cueva de los Gigantones, Cerro Ecce Homo, Arroyo de las Zarzas, Camino de la Barca, Camino de Anchuelo, Alto de los Reventones, Camino de los Barrancos, Barranco Salobre.
M A P A P E R F I L F O T O S Track KML W I K I L O C Análisis IBP
Tipo de Ruta: Circular Dificultad: Media (IBP: 56) Recorrido: 15,8 km Ciclable: NO
Tiempo Total: 3:49 horas Tiempo en Movimiento: 3:19 horas Altitud
mínima: 588 metros
Altitud máxima: 822 metros Desnivel
positivo: 456 metros Desnivel
negativo: 457 metros
Desnivel acumulado: 917 metros Fuentes: NO Sombras: 30%
Recomendada: evitar días muy calurosos Realizada: 27-11-2021 Señalizada: NO
Descripción:
Ruta que transcurre mayormente
dentro del Parque Natural Los Cerros, perteneciente al T. M. de Alcalá de
Henares, excepto unos tres kilómetros que se adentra en el T. M. de Villalbilla, una vez
dejado el Camino de Anchuelo, hasta la zona del Gurugú. Decir que hay dos
tramos no indicados para niños, así como para personar que padezcan de vértigo.
Después de tres semanas vuelvo a retomar las salidas con Santiago y visto, que la climatología es muy adversa en la sierra, nos dirigimos al Parque Natural los Cerros de Alcalá. El punto de partida y final, está en el aparcamiento destinado al Parque; situado en el km-25 de la ctra M-300, dirección A2, desde el que tomamos rumbo norte, cruzando el Barranco Salobre y siguiendo el camino de la izquierda en la siguiente bifurcación.
Pasado un mirador, rodeamos la Finca los Siete Olivos o Centro Remar, dedicado a la rehabilitación de personas marginadas. Pasada una barrera enlazamos con el Camino del Castillo y senda azul (Ruta del Castillo Árabe), continuando hasta desviarnos a siniestra; por una senda que transita muy cerca del río Henares -recorrido no aconsejable para niños-, ni tampoco si se sufre de vértigo. Además de para nadie, cuando el suelo esté mojado y resbaladizo.
Desembocado de nuevo en el Camino
del Castillo, torcemos a derecha y unos cuatrocientos metros después, giramos a
izquierda para ascender por senda al Cerro de Malvecino (3,3km); de especial importancia en la
reconquista de la antigua fortaleza, pues fue el lugar desde el que se
bombardeó con piedras y bolas de fuego.
De las dos opciones para el descenso -de similar pendiente-, elegimos la senda de la derecha que nos devuelve al Camino del Castillo. Prosiguiendo a la diestra, en trescientos cincuenta metros estamos a la boca de la Cueva de Malvecino. Superada su pequeña entrada, nos sorprende su calle principal (unos 20 metros), de la que parten ramales a izquierda y derecha, que terminan en <ventanas de ventilación>, así como diversas cavidades en ambos lados, que servirían de almacenaje.
Metros después, dejamos a derecha los
Caminos del Hoyo y de la Barca, llegando poco después al
cauce de un regato,
y camino que lleva a la antigua fortaleza; viendo un magnífico panel
informativo. La corta subida termina en el Cerro
de Veracruz o Cerro del Castillo, donde destaca los restos de la Torre Albarrana y un arco, por el que
se accedía al interior del Castillo de Alcalá La Vieja;
antigua fortaleza triangular del siglo IX-X, compuesta por ocho torres.
Continuando hacia el Este, el camino se hace senda y culebrea entre depresiones del terreno, subiendo al Cerro Ecce Homo; éste es el otro tramo no aconsejable para niños y personas con vértigo.
En cuatrocientos metros hay una bifurcación, la seguimos a siniestra y en sesenta metros estamos ante la diminuta entrada a la Cueva de los Gigantones. Casi arrastrándonos nos adentramos unos metros, echamos una ojeada y dado que hay bastante basura (increíble hasta donde llega la gente incívica) y dándonos malas sensaciones, salimos de ella. Aquí dejo el enlace al video más reciente en YouTube.
Regresando a la senda, continuamos al Este medio kilómetro más y superada una fuerte rampa del 46%, alcanzamos la máxima altura del recorrido (6,4km – 827m); en la explanada del Cerro del Ecce Homo, donde disfrutamos de inmejorables vistas. Pasando junto a la caseta del guarda forestal, rodeamos la llanura y nos encontrarnos por tercera vez; con otra pareja de senderistas que realiza similar recorrido.
Obviando los ínfimos restos de la Ermita del Ecce Homo y el vértice geodésico del cerro, iniciamos el descenso por el trazado de la ruta amarilla (Ruta del Ecce Homo). Entrados en el pinar, cruzamos el Barranco de la Zarza, vemos el panel informativo de la ruta y cien metros más; dejamos el camino para seguir la senda junto al arroyo y en algunos momentos, por el mismo cauce.
Después de cuatrocientos bonitos metros de recorrido, dejamos el arroyo y con dirección Sur, iniciamos la tercera subida, enlazando con el Camino de la Barca y poco después con el Camino de Anchuelo; saliendo del bosque y entrando en el T. M. de Villalbilla. En el cruce de caminos, torcemos a la derecha, arribamos al Alto de los Reventones y andamos por las alturas, con magníficas vistas.
Luego de dos kilómetros y medio de secano, regresamos al pinar, entroncamos con la ruta verde (Ruta de la Puerta Verde), andamos hasta una barrera que corta el acceso de vehículos y por ella accedemos a la zona de viviendas del Gurugú, donde hay un parque infantil. Bajando de él, volvemos a tierras alcalaínas y seguimos el Camino de los Barrancos.
El descenso nos lleva a la llana zona de los Tarays, con tramos de camino relleno por restos de ladrillo que le da color al paisaje. Haciendo un giro a la derecha, nos alejamos de la carretera y llegamos al Barranco Salobre y camino compartido por la senda roja (Ruta de los Tarais) y senda verde.
Trescientos metros después, dejamos el camino y por una apenas visible senda, hacemos la cuarta subida que nos lleva al cerrete; en cuya cara norte está el aparcamiento, finalizando la variada y vistosa ruta.
