Tipo de Ruta: Lineal Dificultad: M / A (IBP: 66)
Recorrido: 18,1 km Ciclable: SI*
Tiempo Total: 5:45 horas Tiempo en Movimiento: 4:48 horas Altitud
mínima: 725 metros
Altitud máxima: 1072 metros Desnivel
positivo: 803 metros Desnivel
negativo: 545 metros
Desnivel acumulado: 1348 metros Fuentes:
NO Sombras: 5%
Recomendada: todo el año Realizada: 26-07-2018 Señalizada: SI (pintura)
Descripción:
Junto al pie de la Presa del Pontón de la Oliva, entra en
la Comunidad de Madrid el “GR-10”; tras dejar la provincia de Guadalajara. Éste gran sendero, recorre
la Península Ibérica, desde su extremo
Oriental en Puzol (Valencia), hasta que finaliza en Lisboa. Atraviesa
Madrid, recorriendo sobre 190 kilómetros y pasando por 21 municipios y sus mejores rincones; de la Sierra de Guadarrama; sus valles y sus dehesas.
Dando la espalda al
embalse, hace tiempo en desuso, hay que girar a la derecha, poco antes de
llegar a la carretera. Pasando junto a los restos, de la capilla del antiguo
poblado de las Casas del Pontón;
utilizado durante la construcción de la presa. Se enlaza con el
camino de servicio del Canal del Jarama y se asciende al Cerro de la Oliva. Ignorar desvíos a la diestra que
lleva: a la almenara y al Yacimiento
Paleolítico de la Dehesa de la Oliva.
Luego de pasar por
encima de las tuberías del Canal del
Jarama, a la derecha y unos diez metros más arriba, se ve la Cueva
del Reguerillo y poco después
se cruza la ctra M-134, pasando junto a
la Minicentral del Atazar y se libra el Arroyo Valdentales por un estupendo puente (2,67km).
Sin dejar el camino
de servicio del canal, se salva otro barranco y coincidiendo con la vaguada del
segundo, por donde discurre el Arroyo
de las Cuevas, se abandona la
pista.
Habrá que trepar una pendiente de sólo 400 metros; pero teniendo que
dosificar esfuerzos para no atragantarse y subido el Cerro de la Bola -aunque no se pisará la cima- se vislumbra más
abajo, el bonito pueblecito de Patones de Arriba (7,92km).
Fundado entre 1527-1555, el nombre proviene del apellido de sus
primeros habitantes que era Patón y hasta el siglo pasado el pueblo se llamó
Los Patones. Los datos están contrastados en un padrón de 1527, registrado en
Uceda. En el que se enumeran los vecinos que contribuyeron en la reparación de
un puente sobre el río Jarama y apellidados Patón.
En 1555 un nuevo padrón conservado en el Archivo de Simancas,
menciona la alquería de la Hoz
de los Patones, hoy Patones de Arriba, integrada por 7 vecinos.
Al recorrer el
pueblo, se pueden leer los paneles informativos, que cuentan su historia. Guiados por las marcas del GR, se sale por la c/. de la
Reguerilla, en busca del Berrueco; por el itinerario coincidente con el “GR-300“ o Senda
Genaro.
Una vez en el Arroyo de
Patones, la senda transcurre junto al cauce, adentrándose en el valle.
El curso del arroyo se vadea varias veces y llegado a un desvío; la
derecha indica al Cancho de la Cabeza; por lo que hay que continuar de frente, en
dirección Noroeste.
Superado el Arroyo de
Valdepinillo, el valle se estrecha y al llegar a un giro cerrado a izquierda; se
cruza por última vez el Arroyo
de Patones, para ascender un corto tramo de unos seiscientos
metros; pero con fuerte pendiente; suavizada por las zetas muy bien trazadas.
La loma esta recorrida por un camino/pista y una buena señalización manda
cruzarla, continuando rumbo Norte y en bajada, que termina en el Arroyo de San Román.
En el mismo lecho del arroyo, la senda gira al Oeste, salvando otro
arroyuelo y encontrando la ctra M-133 (12,3km); que habrá
que atravesar, para remontar el altozano y entrar en el T.M. de El Berrueco (13km – 1.067m), donde se
consigue la máxima altura de la ruta y desde la que se divisa: la
Atalaya de El Berrueco; parte del Embalse del Atazar y el pueblo;
que será final del recorrido. Bajar hasta la ctra M-133 y sin cruzarla, transitar junto
a ella unos 300 metros, hasta dejarla en un cruce de caminos; donde otra señal
indica perfectamente la dirección a seguir, que será al Noroeste.
Nada más
iniciar el último descenso, se pasa junto a un descansadero/abrevadero de
ganado y poco después, se pasa bajo una L.A.T. Finalmente pasa un puente, sobre el Arroyo de la Dehesilla (15,7km); que es una cola, del Embalse
de El Atazar y desde aquí un ancho camino llevará hasta El Berrueco, entrando por
la c/. de la Iglesia; dejando la parroquia a la derecha.
La iglesia de Santo Tomás Apóstol, del siglo XIII, esta situada
en la parte alta del pueblo, sobre el lugar que ocupo una antigua ermita. Se
reformo en el XVIII, destacando la portada de tres arcos de ladrillo con
molduras, vinculada a la tradición románico-mudéjar y su potente torre de tres
cuerpos de altura y planta cuadrada.
Andando por la c/. de la
Iglesia , c/. de la
Peña y c/. de los Huertos, se desemboca en la Plaza de la Picota;
fin del trayecto y en la que destaca el singular monumento que le da nombre.
La Picota, es el elemento más representativo de El Berrueco, pues
es el único pueblo de los 178, de la Comunidad de Madrid, que la conserva. Su existencia
como rollo o columna, procede del año 1000, según la inscripción existente en
la parte superior; y como picota, al siglo XVI. Cuando representaba un
signo de jurisdicción penal. La picota era el extremo del rollo o columna, dándosele por
extensión el nombre a toda la construcción.
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