domingo, 19 de enero de 2025

La Maliciosa 2025 por Los Almorchones y Canal de Todos, regreso por Ventana de las Buitreras

La Barranca, Los Almorchones Altos, El Peñotillo, Canal del Peñotillo, Tubo o Canal de Todos, La Maliciosa, Senda de Las Buitreras, Ventana de las Buitreras, Collado de las Tijerillas, Paso Cagalera, Senda Alakan, arroyo de la Maliciosa, Embalse del Ejercito del Aire.

M A P A      P E R F I L      F O T O S      Track KML      W I K I L O C      Análisis IBP

Tipo de Ruta: Circular   Dificultad: Alta (IBP: 120)   Recorrido: 9,8 km   Ciclable: NO

Tiempo Total: 5:13 horas   Tiempo en Movimiento: 4:01 horas    Altitud mínima: 1382 metros  

Altitud máxima: 2227 metros    Desnivel positivo: 915 metros    Desnivel negativo: 913 metros

Desnivel acumulado: 1828 metros      Fuentes: NO      Sombras: 15%     

Recomendada: todo el año*      Realizada: 18-01-2025      Señalizada: SI (hitos de piedras)



Descripción:

Nota: lo repito en todas las rutas de alta montaña, la recomendación apta para todo el año, tiene el asterisco para indicar que lógicamente, siempre habrá que tener en cuenta la climatología del momento y en invierno, según esté con nieve o helado, puede ser muy difícil e incluso imposible. Salvo querer correr un riesgo innecesario, pues la montaña no se va a mover y ya se presentarán mejores días.

Como todo lugar pintoresco, atractivo o llamativo en el senderismo, La Maliciosa también tiene su leyenda, así su nombre no solo se relacionará con la dificulta de llegar a ella (exceptuando su lado norte) o a lo escarpado de su terreno. Al parecer corre una leyenda, sobre una anciana que atemorizaba al pequeño pueblo de Cercedilla.

Ella vivía en una negra casona, donde practicaba la brujería y gracias a un pacto con el diabólico, tenía poderes sobrenaturales, que le permitía ascender la montaña rápidamente, para degustar los frutos del jardín/huerta que había en su cumbre mientras que; para el resto de habitantes era prácticamente inaccesible.

Como a cada cerdo le llega su San Martín, llego un día que un grupo de vecinos se armó de valor y decidió seguirla para encontrar su secreto. Descubierto el hecho por la bruja, llego a tal punto su furia que desató un incendio, que arrasó casas y pastos de Cercedilla, así como también el vergel de la montaña, quedando al descubierto la mole de granito y pasando a llamarse por los vecinos; con el nombre actual. 

Lo que está claro es que su aspecto sobresale en el perfil de la Meseta Central, pues ya en el Libro de Montería del rey Alfonso XI de Castilla (siglo XIV)), se hacía referencia a La Maliciosa como “la maldecida”, ya que “áspera y negra se transforma en ocasiones en la perversa” y “su roca siempre desolada y desnuda recibe todos los ataques enfurecidos del viento, hielos, aguas y sol”.

Un nombre menos conocido para referirse a ésta montaña es, La Monja, pues al parecer (todo depende al final de la imaginación), al estar nevada y viendo su cara sur, puede recordar a un antiguo tocado de alguna orden monacal. De una u otra manera, su fama viene de lejos, pues Velázquez pintando al Príncipe Baltasar Carlos en 1635, la incluye en su fondo.

En mi quinceava subida a la montaña, me acompaña Santiago (como suele ser habitual los fines de semana), su hijo Alejandro y su amiga Laura, partiendo del aparcamiento de La Barranca; punto desde el que se inician un gran número de rutas, pasamos por el dique del Embalse del Pueblo de Navacerrada; giramos a derecha y seguimos la senda que se dirige a los Almorchones Altos, viendo el panel de la ruta oficial, denominada ruta Mariano.

Por la visible senda entramos en zona protegida del P. N. de la Sierra de Guadarrama, pasamos cercano a la piedra conocida como el Perro de la Barranca, alcanzamos la Cuerda de los Almorchones (1,7km) y entramos en el término municipal de Becerril de la Sierra. Ascendiendo por la cuerda, pasamos junto a un vivac; y dejamos a izquierda y a pocos metros, el Peñotillo Bajo.

Con la vista del Peñotillo que se agranda a medida que nos acercamos, llegamos a su base, donde hay una cueva-vivac y rodeando la gran mole con escaladores preparándose para la aventura, con un pequeño descenso llegamos al Canal del Peñotillo (2,9km), por el que ascendemos un poco, hasta desviarnos a derecha por tramo muy confuso hasta llegar al pie de La Maliciosa.

Ahora nos toca descender un poco para poder seguir rodeándola y llegar al entronque con las rutas que vienen del arroyo de la Gargantilla y del collado de La Maliciosa, en el punto de inicio del Tubo (o Canal) de Todos; paso en forma de Y griega, librando en su estrecha primera parte, una pequeña trepada y luego se puede tomar de frente para salir al PR- M 16 o a la izquierda; opción que tomamos.

Tras otra pequeña trepada, hacemos unas fotos sobre la piedra conocida como el trampolín o púlpito y atacando los últimos doscientos metros, alcanzamos el vértice geodésico de La Maliciosa (3,9km – 2227m), luego de haber superado en el último medio kilómetro, la máxima pendiente que ha llegado a tener una media del 33% y rampa del 66%. La estupenda visibilidad nos permite avistar la completa panorámica que comprende.


Al norte el Alto de Las Guarramillas (popularmente Bola del Mundo), con sus antiguos repetidores de radio y televisión, parte de Cuerda Larga y al fondo Peñalara. Al oeste las formaciones de Siete Picos, Montón de Trigo y La Mujer Muerta (Pinareja, Peña del Oso y Alto de Pasapan). Al sur y hacia la derecha: El Embalse de Majaespino o de la Maliciosa, el Embalse de Navacerrada, Becerril de la Sierra, Moralzarzal, Alpedrete, Villalba, Guadarrama y el Embalse de Valmayor. Y al sur y hacía la izquierda: el Embalse de Santillana, el Cerro San Pedro y más al fondo; el Embalse de El Pardo y las Torres de Madrid.

Con la parte más difícil realizada, seguimos al norte la senda del PR-M 16 hasta desviarnos a izquierda por la senda de Las Buitreras (compartida un tramo con la del pino solitario y tras medio kilómetro (5,9km), pasamos por la Ventana de Las Buitreras; de su parte sur a la norte y luego de dos destrepadas o arrastaculos, llegamos (6,4kim) al Collado de las Tijerillas.

La idea era seguir la senda SL-MN 4 hasta el arroyo de la Maliciosa, pero los compañeros, insaciables de aventuras quieren también conocer el Paso Cagalera, así que nos dirigimos a él, lo cruzamos descendiendo por su escalera de hierro y cadena; 

desembocando en la pista de La Barraca (7km), que tomamos a izquierda, para metros después desviarnos a siniestra por la Senda AlakanDespués de casi kilómetro y medio por la agradable senda, vadeamos el arroyo de la Maliciosa 

y sobre quinientos metros más estamos en el Embalse del Ejercito del Aire, por cuyo dique cruzamos al otro lado, pasando junto a la Fuente de la Casa de Guías (escondida a la izquierda y junto a la Caseta de Guías que le da nombre; y de nuevo en la pista de La Barranca, finalizamos por ella.                            

lunes, 13 de enero de 2025

El Hoyo de Pinares, ruta 13 Mesa de los Sacrificios, río Sotillo, Peña Halcón, Mina el Majo

La Encrucijada, Mesa de los Sacrificios, río Sotillo, Valdeloriga, Risco Peña Halcón, Camino del Fresnazo, Mina el Majo, Fuente Cuesta Mala.

M A P A      P E R F I L      F O T O S      Track KML      W I K I L O C      Análisis IBP

Tipo de Ruta: Circular   Dificultad: Media (IBP: 69)   Recorrido: 18 km   Ciclable: NO

Tiempo Total: 4:21 horas   Tiempo en Movimiento: 4:04 horas    Altitud mínima: 704 metros  

Altitud máxima: 991 metros    Desnivel positivo: 685 metros    Desnivel negativo: 683 metros

Desnivel acumulado: 1.368 metros      Fuentes: NO      Sombras: 15%     

Recomendada: todo el año      Realizada: 11-01-2025      Señalizada: SI / NO

fotos de Santiago

Descripción:

Nota: a tener en cuenta el vadeo del río, que puede ser conflictivo en muchas épocas. Aconsejable tomar a izquierda en la confluencia (8,4km) de las tres rutas, para poco después torcer a derecha por el camino, al que se sale en la ruta, al dejar el río, resultando una ruta de 15 kilómetros.

Quiero comenzar diciendo, que los tramos de rutas que coinciden con el recorrido (de ahí el SI / NO), están extraordinariamente bien señalizados, con balizas y postes informativos con nombre y dirección en los desvíos; por lo que felicito al ayuntamiento de El Hoyo de Pinares.

El recorrido toca parte de cuatro rutas (VI, VII, X y XII), siendo totalmente campestre y con ligera montaña, que supone un continuo vaivén de altura, permitiendo disfrutar de estupendas vistas y variados paisajes, donde se podrán avistar algunos de la variedad de animales, que pueblan la zona, como el zorro (que tuvimos la suerte de ver al comienzo), buitre (vistos en el entorno de El Tejar), cernícalo, picapinos, halcones, chovas piquirrojas, jabalíes (visto el rastro que dejan), conejos y liebres.

Así mismo, ya que el término municipal cuenta con el mayor número de minas de la provincia, también se acerca a una mina, que como el resto fueron explotadas hasta el siglo XIX. Entre los diferentes minerales las había de cobre, hierro y plomo; en la actualidad las minas se confunden con el entorno, no percatándose de ellas si no se tiene la ubicación exacta.

La andadura la inicio en compañía de Santiago, en el kilómetro 10 de la ctra Av-561, zona conocida como La Encrucijada, donde está el panel de las rutas VI Cuesta Mala y XII Las Cabreras, en la parte sur de la carretera y en el norte; el panel de la ruta El Cuervo. Siguiendo pues al sur, metros después en la bifurcación, seguimos el ramal de la derecha, señalizado con balizas de las rutas VI y XII.

En la siguiente bifurcación a trescientos metros, una baliza con el nombre de las rutas, indica la XII hacia el sur y nosotros seguimos por la ruta VI (marrón), pasando entre vacas de la especie avileña (negras y con cuernos) y viendo una baliza que indica el km-11, ya que vamos en sentido contrario al trazado oficial; llegando seguidamente al primer cerrete.

Lugar donde se encuentra la piedra denominada Mesa de los Sacrificios, posible santuario o altar vetón. Los Vetones fueron un pueblo prerromano, organizado alrededor de la familia que vivían en una sociedad muy jerarquizada y donde cada miembro tenía una función específica. Fue un pueblo guerrero que trabajaba el hierro, principalmente para fabricarse las armas.

Continuando tras las balizas marrones, pasamos entre otra manada de vacas y dos pequeños collados, siendo en el segundo (2km), donde dejamos la ruta VI y proseguimos a nuestro aire por camino/senda, pasando al norte del cerro El Tejar y viendo volar sobre nuestras cabezas, una bandada de buitres. Terminado el pequeño remonte, iniciamos un largo descenso, entroncando con un camino/pista, que seguimos a siniestra.

En pocos metros, disponemos de un buen mirador natural sobre el río Sotillo y casi un kilómetro después (4,2km), enlazamos con la ruta X (azul) Castrejón, Peña Halcón, que tomamos a derecha para acercarnos al río, con dos pequeños puentes de madera que ayudan a salvarlo. Regresando al desvío, seguimos las balizas azules, remontando al noroeste por la zona de Valdeloriga.

Llegados a un desvío señalizado, giramos a derecha y pasando por la granja y corrales de Valdeloriga, tras las balizas azules y finalmente con ayuda de algún hito de piedra; llegamos al inicio de los bonitos metros finales, con algunos escalones, agarraderas de hierro y cables para ayudarse; tanto en la subida como en la bajada, cosa que se agradece.

Una vez en la cima del Risco Peña Halcón (6,4km -982m), máxima altura de la ruta y extraordinario mirador, se disfruta de la enorme panorámica, desde la que se avista el núcleo urbano de El Hoyo de Pinares. Realizado el descenso, proseguimos por la senda azul, desviándonos unos metros a izquierda para ver otra granja y corrales abandonada.

Poco después volvemos a encontrar la ruta VI (8km) y tomando al sur, seguimos las balizas que señalizan el tramo compartido, hasta llegar a otra bifurcación (8,4km) señalizado con poste de las rutas VI, VII y X; donde dejamos la ruta VI (que tuerce a izquierda), para seguir a derecha con las rutas VII (amarilla) y X (azul), por el Camino del Fresnazo.

Con un pequeño atajo por senda, llegamos al Puente (que permite el paso de vehículos) sobre el río Sotillo, continuando por la pista y dejando en el segundo desvío a derecha (9,8km), las dos rutas que marchan hacía el pueblo. Nosotros proseguimos dejando a izquierda la Hoya de los Sebastianes y luego de iniciarse la segunda curva a izquierda, dejamos el camino y nos dirigimos al río.

Una vez en el río Sotillo, buscamos el mejor punto para vadearlo, que nos parece donde se ramifica en dos corrientes (11km), pudiendo salvarlo pisando alguna piedra y con la ayuda de los bastones. Ya en el otro lado, transitamos lo más cercano al río que podemos, disfrutando durante unos ochocientos metros de la proximidad de la corriente y unos bonitos prados.

Viendo un antiguo camino que cruzaba el río, donde están los restos de una pasarela de madera, llegamos a un chozo en ruinas y donde el rio se desliza por unas lanchas de piedra, punto en que abandonamos la corriente (11,8km) y subiendo durante unos doscientos metros monte a través, con dirección Este, llegamos a otro buen camino; que seguimos a la diestra.

En medio kilómetro (12,5km), volvemos a encontrar la ruta XII (amarilla), viendo poco después el desvío a la Mina el Majo (12,9km), a la que llegamos en menos de lo que indica la señalización. La antigua explotación de plomo, zinc y plata, sirve hoy de perfecto refugio a multitud de animales, entre los que se encuentran los murciélagos, que debemos respetar y no molesta; sobre todo en épocas de hibernación.

De nuevo en la ruta, dejamos la ruta VII que sigue al norte y nosotros por un rastro/senda, salimos a un camino por el que continuamos a izquierda. En la siguiente bifurcación, un poste informativo nos dice que nos reencontramos con las rutas VI y XII, con las que seguimos a derecha, pasando junto a otra vieja granja; tras la que se separan (13,7km) las rutas; continuando nosotros con el trazado de la VI, la más coincidente en todo el recorrido.

En continúa subida y pasando junto a la Fuente Cuesta Mala (que es un abrevadero) y la Fuente de la Reina, demasiado nombre para un simple depósito en una parte del camino y un abrevadero en el otro;


salvo explicación que no he encontrado, terminamos la rampa, llegamos al punto en que nos desviamos al comienzo y viendo a la derecha el poste que señala la ruta XII, finalizamos, el muy atractivo recorrido. 

viernes, 10 de enero de 2025

Campo Real, Paseo Urbano, Ermitas y Lavadero

Campo Real, Ermita Virgen de los Remedios, Ermita Virgen de las Angustias, Ermita del Santo Cristo de la Peña, Parque San Sebastián, Parque de la Fuente (lavadero), Iglesia de Santa María del Castillo.

M A P A      P E R F I L      F O T O S      Track KML      W I K I L O C      Análisis IBP

Tipo de Ruta: Circular   Dificultad: Baja (IBP: 20)   Recorrido: 5,3 km   Ciclable: SI*

Tiempo Total: 1:32 horas   Tiempo en Movimiento: 1:12 horas   Altitud mínima: 713 metros  

Altitud máxima: 788 metros    Desnivel positivo: 114 metros    Desnivel negativo: 112 metros

Desnivel acumulado: 226 metros      Fuentes: SI      Sombras: 5%      

Recomendada: todo el año      Realizada: 08-01-2025      Señalizada: NO

Descripción:

Campo Real, es un mediano municipio de 61,75 kilómetros cuadrados de superficie, que lo sitúa en el puesto 30 de la Comunidad de Madrid por superficie. Se encuentra en el centro/Este, entre los T. M. de Pozuelo del Rey, Loeches, Arganda del Rey, Perales de Tajuña y Valdilecha. Tiene una población en torno a los seis mil ochocientos habitantes, cuyo gentilicio es campeño.

Está comunicado por la ctra M-209 y 220 y el transporte público lo cubre la línea 313 desde el Intercambiador de Conde Casal, además de la 320 y 321 que la unen con el Hospital de Arganda y Alcalá de Henares y Villar del Olmo, respectivamente.

El término municipal, forma parte de la llamada Comarca de las Vegas y La Alcarria, junto con los treinta restantes: Ambite, Anchuelo, Belmonte de Tajo, Brea de Tajo, Carabaña, Chinchón, Ciempozuelos, Colmenar de Oreja, Corpa, Estremera, Fuentidueña de Tajo, Morata de Tajuña, Orusco de Tajuña, Nuevo Baztán, Olmeda de las Fuentes, Perales de Tajuña, Pezuela de las Torres, Pozuelo del Rey, San Martín de la Vega, Santorcaz, Tielmes, Titulcia, Valdaracete, Valdelaguna, Valdilecha, Villaconejos, Villamanrique de Tajo, Villar del Olmo, Villarejo de Salvanés y Valverde de Alcalá.

El pueblo comenzó llamándose Aldea del Campo y estuvo sujeta a la dependencia de la Villa de Alcalá de Henares hasta 1555, año en que tras el pago de 7.000 ducados al rey Felipe II, éste eleva su categoría a la de Villa, pasando a llamarse a partir de entonces Villa de Campo y trasladando su dependencia directamente al arzobispo de Toledo.

Continúa en los dominios del arzobispo hasta que el rey, necesitado de fondos, la vende en octubre de 1579, al prestamista genovés Baltasar Catano, quien planeaba revenderla a Don Íñigo de Cárdenas, algo a lo que los vecinos se opusieron y, reuniendo 17.000 ducados, compraron su libertad, pasando a depender directamente de la Corona, ya con el actual nombre de Campo Real.

La dependencia real cesa, cuando Felipe IV debido a la mala situación económica del reino, decide vender diferentes lugares de realengo, entre ellos Campo Real, cuya jurisdicción es adquirida en 1636 por Don Íñigo Vélez de Guevara y Tassis, Conde de Oñate, alargándose las negociaciones durante diez años, hasta que en 1646; se firma el contrato de compra.

Anteriormente, en 1639, el rey le había concedido el título de Conde de Campo Real. Más tarde, los años convulsos de la guerra por el trono español, entre Felipe V y el archiduque Carlos de Austria, afectarían directamente a Campo Real; que vio cómo su población disminuía y cómo los soldados del archiduque arrasaban la ermita de San Juan Bautista.

Acompañado por Victorino, Pedro y Kike, partimos del aparcamiento gratuito situado en la c/. Vilches, cruzando la calle y siguiendo a la izquierda por c/. Pedro Collado Belinchon, pasando junto a las dependencias de la Policía Local, para luego subir hasta la Ermita de la Virgen de los Remedios. Edificio que data del siglo XVI, ya que aparece registrada en las Relaciones Topográficas de Felipe II, aunque la vista actual es debida a una reconstrucción del siglo XVIII.

Cruzada de nuevo la calle Vilches, subimos por c/. Virgen de la Soledad, hasta poder girar a derecha y por camino/senda, ascender hasta cercano a la Av. de Arganda, donde disponemos de una primera gran vista de la iglesia, antes de llegar a la Ermita de la Virgen de las Angustias.


Situada en la c/. Morata, al este de la población. Es la construcción más antigua del municipio, que data también del siglo XVI y había sido un antiguo humilladero en el Camino de Arganda. Junto a la ermita hay una fuente de agua potable. Siguiendo calle abajo, torcemos a derecha y vista la siguiente ermita, bajamos por unas escaleras hasta ella.


Estamos en ante la Ermita del Santo Cristo de la Peña, en el número 20 de la c/. del Cristo. La ermita es de estilo barroco y fue construida en el año 1717 por iniciativa de D. Diego Isidro de Guzmán y la Cerda, XV Conde de Oñate y segundo señor de la villa. Junto al templo se encuentra el Centro de Salud, con atención de urgencias las 24 horas.

En dos pasos y viendo una bonita farmacia, llegamos a la Plaza Mayor, donde está el ayuntamiento, sin los protocolarios mástiles de las obligadas banderas. De nuevo y pasando punto al Centro de Salud, seguimos por c/. Carretera Villar del Olmo, viendo una moderna peluquería con un cochecito para que los peques estén más entretenidos mientras les cortan el pelo.

Torciendo por c/. Cuesta de las Eras, entroncamos con la Av. de Arganda y bajamos hasta el Parque San Sebastián. Luego cruzamos la carretera de Perales (M-220), la Av. Príncipe Felipe (M-221), y torcemos por c/. Carretera Villar del Olmo (M-219), viendo a la izquierda la Casa Cuartel de la Guardia Civil y a derecha el Restaurante Casa Mauro; donde comeremos.

Al final está el Campo de Futbol y la Piscina Municipal y retrocediendo unos metros, seguimos al norte por c/. Paris y con el campo de futbol a derecha, para desembocar en el Paseo de Pozuelo; donde está el Polideportivo Municipal y el Colegio Público Miguel Delibes. Continuando por c/. Amsterdam y luego senda/camino, salimos a la M-220 carretera de Loeches.

Callejeando hacia el noroeste, llegamos a la c/. Los Rosales y bajamos por ella hasta dejarla por un camino que sale a la derecha, y que ignorando un desvío nos lleva con dirección oeste, al Parque de la Fuente y antiguo Lavadero o mejor digo, Lavaderos; pues tiene el lavadero de verano (descubierto) y otro cubierto, para el invierno, días lluviosos o muy calurosos.

Existe un manantial de agua potable denominado “la fuente” en la parte baja del pueblo. En 1910 se soluciona el problema que suponía el lavadero público descubierto. El Ayuntamiento decide tapar parte de los arcos del lavadero cubierto y cubrir el descubierto, se efectúan además obras como la limpieza y desagüe del arroyo, derribo del muro de ladrillo en el arroyo de los Caños que interrumpía el curso de las aguas, así como la reparación del solado de los pilones de lavado.

Venciendo la fuerte pendiente de la c/. Camino de la Vega, subimos por escaleras hasta la imponente Iglesia Parroquial de Santa María del Castillo, rodeada por las estatuas de los doce apóstoles: San Felipe, Santo Tomás, Santiago el Menor, San Pedro, San Pablo y San Judas Tadeo, alrededor del templo y en las escaleras de descenso a la c/. Santa Ana: Santiago el Mayor, San Andrés, San Mateo, San Juan, Simón y San Bartolomé.


Todo el conjunto de estatuas, se agregaron al entorno de la iglesia en el 1993, habiendo sido ya declarada Monumento Histórico Artístico en 1981. El templo situado sobre un cerro, se divisa a kilómetros de distancia, y tiene una mezcla de estilos gótico, renacentista y barroco; siendo su origen un castillo-hospital de la Orden Hospitalaria.

Desde aquí con giros a izquierda y derecha, llegamos a la c/. Vilches, por la que finalizamos, pasando junto a otro aparcamiento, pero con tiempo limitado. Tengo que añadir, que el pueblo cuenta con un mercado de abastos. Junto al que está el Museo de Alfarería y productos típicos; pero al indicar la dirección en la información del ayuntamiento, no he podido localizarlo.

Antes de que la industria moderna invadiese el pueblo, la alfarería era la principal industria local. Godos, visigodos, árabes y cristianos hicieron de Campo Real un pueblo alfarero hasta el extremo que existieron en la localidad hasta 30 alfares con hornos árabes para la cocción. Ya en el año 1752 se tienen los primeros datos documentados sobre esta actividad. 

martes, 7 de enero de 2025

El Berrueco, ruta 09 Camino de la Cabrera, Ermita de Valcamino, Atalaya, Cerro San Román

El Berrueco, Camino de la Cabrera, Ermita de Valcamino, Atalaya Torrepedrera, GR-10, GR-300, Cerro de San Román, Embalse de El Atazar.

M A P A      P E R F I L      F O T O S      Track KML      W I K I L O C      Análisis IBP

Tipo de Ruta: Circular   Dificultad: Media (IBP: 69)   Recorrido: 17,1 km   Ciclable: NO

Tiempo Total: 4:16 horas  Tiempo en Movimiento: 4:02 horas  Altitud mínima: 871 metros  

Altitud máxima: 1189 metros  Desnivel positivo: 649 metros  Desnivel negativo: 648 metros

Desnivel acumulado: 1297 metros      Fuentes: NO      Sombras: 10%     

Recomendada: todo el año      Realizada: 31-12-2024      Señalizada: NO

fotos Santiago

Descripción:

Nota: para realizar la ruta es aconsejable gps, dado el gran número de posibles desvíos, no estando señalizado. 

El recorrido tiene dos puntos a destacar, las ruinas de la Ermita de Valcamino y yacimiento (que no se ve) y la torre árabe que data de los siglos IX-X.

Desde el pueblo y siguiendo al oeste (para luego ir virando al suroeste), se camina primero por senda y luego por el Camino del Berrueco a La Cabrera (vecina localidad), hasta desviarse para llegar al cerro de La Atalaya, sin vértice geodésico; pero con muy buenas vistas.

Una vez bajado de él, se rodea parte de la Dehesa y finalmente se enlaza con el Camino del Navazo, único señalizado, que lleva al asentamiento visigodo y ruinas de la Ermita de Santa María de Valcamino, que data de entre los siglos VI al IX. La pequeña iglesia rural se encuentra en un altozano junto a un manantial, cerca de los arroyos Jóbalo y San Vicente, afluentes del río Jarama; próxima a una de las rutas que históricamente transitaron la sierra madrileña desde Complutum hacia el paso de Somosierra.

Las estructuras de la pequeña iglesia y de las edificaciones de su entorno, están construidas en mampostería y sillares de granito local, calizas y dolomías de las cercanas crestas cretácicas de Venturada y Torrelaguna. El templo visigodo primitivo era una iglesia de nave única y cabecera rectangular, con un ábside apoyado en su muro testero y un bloque prismático de caliza a modo de altar.

Por sendas y caminos, se baja y sube hasta la Atalaya de Torrepedrera, conocida también como de El Berrueco. La torre musulmana formaba parte de un sistema defensivo de vigilancia, denominado Marca Media y que en esta zona controlaba el paso por el puerto de Somosierra. Desde su parte más alta, mirador privilegiado, se obtiene una panorámica donde destaca el Embalse de El Atazar, el pueblo de El Berrueco y la Sierra de La Cabrera.

La torre-vigía fue construida en algún momento indeterminado entre los siglos IX y X, o sea, entre el emirato de Muhammad I de Córdoba y la época de Abd al-Rahman III, y formaba parte de un sistema de vigilancia de la Sierra de Guadarrama, con la función de controlar los principales valles y vías de comunicación islámicos, ante posibles incursiones cristianas.

Las torres vigías, de forma circular y con gruesos muros de mampostería, se componían de tres partes: la sólida base que arrancaba del suelo y podía alcanzar los tres metros de altura, la segunda, en la que se encontraba la entrada y que a simple vista parece una ventana, siendo realmente la entrada que situada sobre los tres metros; necesitaba de una escala de cuerdas o agarra manos.


 Y finalmente, la tercera que era el punto de vigilancia y desde el qué con señales visuales durante el día y fogatas en la noche, avisaban de los posibles peligros.

La ruta sigue ligeramente al norte, en parte por el trazado del GR-10 y GR-300 o antigua senda del Genaro; muñeco de color azul que todavía puede verse en algunos tramos, de ésta ruta que circunvala el embalse de El Atazar, pasando por los pueblos de su entorno.

Dejado el trazado de los GRs, se remonta hasta el Cerro de San Román, hasta qué cruzado el cercado, se enlaza con una bonita senda, y luego por otras, que después de cruzar varios caminos, desciende y cruza varios arroyos que son colas del embalse, hasta volver a entroncar con los GRs y Camino de Patones, por el que se retorna a El Berrueco, pasando junto a su Iglesia de Santo Tomás Apóstol.